Si te han diagnosticado una artritis inflamatoria, como la artritis reumatoide o la artritis psoriásica, es probable que hayas pensado en cómo debes cambiar tu dieta para ayudar a controlar tu enfermedad.

Saber qué comer, y qué no comer, cuando tienes artritis, es complicado. La investigación científica sobre esto es limitada y conflictiva. Hay una gran cantidad de información aún no comprobada en el internet. Seguir los consejos de un paciente que jura tener una buena dieta podría convertirse en tu peor pesadilla.

Según dos nutriólogos que tienen artritis reumatoide, “saber que comer cuando tienes artritis es incluso difícil para los expertos que conocen los detalles de la ciencia de la nutrición. Hablamos con ellos para aprender no solo lo que comen, sino también cómo encontraron una dieta para la artritis reumatoide que funciona para ellos. Esto es lo que aprendimos de sus historias:

1. Preferencia a la dieta mediterránea

No hay una dieta específica recomendada para personas con artritis reumatoide, las investigaciones vinculan un patrón de dieta mediterránea con una disminución de la inflamación en personas con AR. La dietista Lisa Andrews, sigue una dieta principalmente mediterránea que incluye verduras, frutas, lácteos, frijoles, lentejas, y nueces. Cristina Montoya, una dietista de salud pública, disfruta principalmente de comidas a base de plantas, mezcladas con pollo y pescado un par de veces por semana. “Soy originalmente de Colombia, por lo que como frijoles, lentejas y garbanzos con bastante frecuencia”.

2. Encuentra tus alimentos prohibidos

No hay una dieta “única” cuando se trata de los alimentos que NO se deben comer cuando se tiene Artritis Reumatoide. ¿Podrían algunos alimentos causar dolores a ciertas personas? Sí, pero esto puede ser un problema individual. Por ejemplo, tanto Andrews como Montoya descubrieron que la carne roja puede ser un alimento que les provoca dolor, por lo que ambas la evitan, entre otros alimentos. Puedes probar una dieta de eliminación para determinar si algún alimento te desencadena los síntomas. La mejor manera de hacerlo es trabajar con un dietista que pueda ayudarte a identificar los factores desencadenantes de manera segura y confiable.

3. Aprende con lo que puedes vivir

Los alimentos que desencadenan dolor en tu cuerpo podrían ser algunas de tus cosas favoritas para comer. Pero eso no tiene qué significar que están completamente prohibidos. Es posible que los puedas comer en porciones pequeñas o de vez en cuando para satisfacer tus antojos. “Me encantan los productos lácteos; sin embargo, los limito a cantidades muy pequeñas”, dice Montoya.

4. Asegúrate de que tu dieta realmente se ajuste a tu estilo de vida

Muchas personas con artritis reumatoide dicen que han encontrado alivio al consumir una dieta sin gluten, eliminar el gluten podría no ser lo adecuado para todos o algo que tengas que hacer a largo plazo. “No consumir gluten es difícil”, dice Andrews. Una tradición de su familia es hacer pizza con sus hijas adolescentes todos los viernes por la noche, y esto es algo a lo que Andrews no esté dispuesta a renunciar. Sin embargo, podría ser una mejor opción limitar tu consumo de alimentos a base de trigo para que te ayude a controlar los síntomas de la AR.

5. No seas incrédulo.

Está bien si no confías que los síntomas de la AR desaparecerán con una dieta. Hay personas que nos han informado que una dieta saludable puede ayudar a controlar los problemas relacionados con esta enfermedad, como los niveles de energía o los malestares digestivos, pero no han visto una diferencia en sus síntomas de la AR.

Incluso los profesionales pueden tener estas dudas. “Como dietista que solía trabajar en programas para alimentar a las comunidades de bajos ingresos, nunca pensé que los alimentos fueran dañinos”, dice Montoya.

Cuando Montoya tuvo éxito al probar una dieta baja en carbohidratos FODMAP (estos son tipo de carbohidratos que no son muy bien absorbidos en el intestino delgado) para identificar los desencadenantes de su síndrome del intestino irritable. Ella comenzó a abrirse a las posibilidades de que los cambios en la dieta también podrían ayudar con la AR. (Una dieta baja en FODMAP elimina ciertos tipos de carbohidratos, que incluyen algunas frutas, vegetales, granos, legumbres y lácteos, ya que se cree que agravan los problemas digestivos en ciertas personas). Mas información aquí.

Entonces, si no estás convencido de que lo que comes realmente ayuda con los síntomas de la AR, no hay problema. Puedes experimentar con una dieta cuando te sientas listo.

6. Seguir con el plan de tratamiento

Existe evidencia de que los alimentos pueden ayudarte a controlar los síntomas pero debe considerarse como un complemento del medicamento que tú y tu doctor han determinado que es adecuado para ti. “Los cambios que hice tuvieron un impacto positivo en mi salud, pero no deberían ser un sustituto para el tratamiento”, dice Montoya. Los medicamentos recetados que se dirigen a la inflamación a menudo son el núcleo del tratamiento para la artritis reumatoide debido a la fuerte evidencia que apoya su éxito.