Zoe Rothblatt

Remisón

Que significa estar en remisión

Si tu médico te dice que tu Artritis Reumatoide (AR) está en remisión … en primer lugar, ¡felicitaciones! Ese es el objetivo de tu plan de tratamiento de Artritis Reumatoide.

¿Qué es la remisión? Esto significa que la actividad de la enfermedad es inferior a un cierto punto. Esta puntuación se basa en varias partes de información que tu médico observa:

  • Respuestas a un cuestionario sobre tus niveles de dolor, actividad y movilidad.
  • El examen de 28 puntos de tus articulaciones para ver qué tan sensible estás, cuanto dolor y cuanta rigidez tienes
  • Pruebas de laboratorio, como exámenes de sangre, que miden los niveles de inflamación en tu cuerpo: cosas como la proteína C reactiva (PCR)

Tu médico examinará todos los resultados de la prueba para obtener el nivel de actividad de la enfermedad. No hay una herramienta “correcta” para decir que estás en remisión o si aún no lo estás.  La opinión de tu médico o enfermera siempre es lo primero. El hecho de que tengas un cierto resultado de la prueba no significa que tu AR no está activa todavía. Y solo porque te sientas bien y seas capaz de hacer tareas que no podías hacer antes de comenzar tus tratamientos, como lavar el coche o trabajar en el jardín, no significa que tu inflamación no siga siendo un problema.

¿Qué pasa cuando se llega a la remisión?

La recomendación general para las personas en remisión es que tu médico disminuya la dosis de tu medicamento hasta un menor nivel. El “estrechamiento” se define con cuidado en la AR: “Reducción de la terapia de un medicamento a la vez (reducción de la dosis o frecuencia de dosificación)“. Cuando y con qué rapidez se “estrecha” es diferente para cada individuo. Pueden pasar meses o incluso años antes de que la reducción sea adecuada para ti.

Por lo que tu médico puede reducir la cantidad de uno de los medicamentos que tomas, o reducir el número de veces que los tomas cada semana o mes. Si tomas más de un medicamento, tu médico puede disminuir los otros uno por uno.

Esto puede tener una gran cantidad de beneficios para ti. Puede que no tengas que tomar tantas pastillas o inyecciones o infusiones como lo hacías antes. Puede que no tengas que surtir tantas recetas. Puede que no tengas tantos efectos secundarios de los tratamientos, debido a que tus dosis son menores.

Pero no dejarás de tomar medicamentos para la artritis por completo en la mayoría de los casos. Porque si lo haces, tu inflamación podría regresar. Tu médico va a analizar la actividad de la enfermedad para asegurarse de que el nuevo enfoque esté trabajando para ti.

Alguna decisión acerca de tu plan de tratamiento ya que estés en remisión debería ser hecho con tus valores y preferencias en mente. Tú y tu doctor deberán tener una conversación para ver todas tus opciones para poder tratar de permanecer en remisión.