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El tiempo de espera entre escuchar a tu médico decir que podrías tener artritis reumatoide y de ver a un reumatólogo por primera vez puede ser difícil. Es posible que estés lidiando con la ansiedad por la posibilidad de tener una enfermedad crónica, tratando de controlar tus síntomas, sintiéndote frustrado en el tiempo de espera y preocupándote por lo que sucederá cuando finalmente llegue el día de tu cita. Es fácil sentirte frustrado en esta situación; como si nada estuviera en tu control. Y aunque eso es cierto hasta cierto punto (después de todo, no puedes controlar lo que está sucediendo en tu cuerpo o en el sistema de atención médica), hay pasos que puedes tomar durante el período de espera para prepararte para tu primera visita con el reumatólogo, lo que puede hacer que sea una cita más exitosa y ayudar a mejorar el dialogo con tu nuevo doctor.

Algunas cosas de tener en cuenta mientras esperas la cita:

  1. La primera cita con un reumatólogo generalmente dura de una a dos horas.
  2. Las próximas citas no serán tan largas, pero tu reumatólogo está tratando de conocerte y a tu historial médico durante esa primera visita.
  3. Discutirán los síntomas que te llevaron a la oficina, te preguntarán acerca de tu historia médica y harán un examen físico.
  4. A veces, esto es suficiente para permitir que el médico haga un diagnóstico. En otras ocasiones, es posible que se necesiten más pruebas, como ecografías y análisis de sangre.

Para que este proceso sea más ameno y para ayudar a aliviar tus temores, aquí hay algunas cosas que puedes hacer para prepararte para tu primera cita con un reumatólogo.

Da seguimiento a tus síntomas

Al referirte a un reumatólogo, tu doctor de cabecera incluirá los resultados de cualquier prueba que haya ordenado. Pero los resultados de las pruebas sólo pueden dar una parte de tu información. Ayuda si el paciente tiene información adicional, especialmente sobre los síntomas”, dice el Dr. Felix Leung, un reumatólogo en Toronto.

Aunque tener apuntes sobre tus síntomas es un buen comienzo, también debes hacer un seguimiento de la intensidad y duración de tus síntomas. Esto puede ayudar a tu reumatólogo a identificar cualquier clave que ayude con un diagnóstico. El Dr. Leung recomienda señalar la ubicación de cualquier dolor, si hay alguna hinchazón o rigidez, y si los síntomas ocurren en un momento específico del día (por ejemplo, ¿el dolor es peor por la mañana o por la noche?).

Puedes hacer un seguimiento de los síntomas en una libreta, tu computadora o en una aplicación en tu teléfono. Considera descargar ArthritisPower, una aplicación que te permite seguir tus síntomas y puedes crear un informe para compartir con tu reumatólogo.

Incluir fotos también pueden ser útil, ya que los síntomas de la artritis reumatoide pueden ir y venir, y es posible que no siempre estén presentes durante una cita.

“A veces veo a alguien en la oficina y no tienen articulaciones hinchadas, pero sus fotos muestran articulaciones obviamente hinchadas. Esa puede ser la diferencia para hacer un diagnóstico más rápido”, dice el Dr. Leung. Tomar fotos de la hinchazón y otros síntomas visibles cuando ocurren le da a tu médico información valiosa.

Documenta tu historial médico

Proporcionar tu historial médico puede ser un proceso largo que depende de tu capacidad para recordar muchos eventos y medicamentos del pasado. Esto se puede hacer mucho más fácil si escribes tu historial médico con anticipación.

Al escribir tu historial médico, mantenlo simple y organizado. Considera la posibilidad de convertirlo en una lista dividida en categorías, como médicos con información de contacto, enfermedades y diagnósticos existentes, cirugías pasadas, medicamentos con información de dosis y cualquier alergia a los medicamentos. La lista de medicamentos es especialmente importante, dice el Dr. Leung, ya que ciertos medicamentos para la artritis pueden reaccionar negativamente o ser menos efectivos cuando se combinan con otras medicinas.

Sugerimos que hagas un seguimiento de tu historial médico en un documento de Word o Google Docs, para que puedas editarlo fácilmente cada vez que cambie algo. Luego, cuando es el momento de ver a un nuevo médico, simplemente imprima una copia para ellos. La autora ha estado haciendo esto durante años y los doctores generalmente están agradecidos por la ayuda. Tener el documento les permite leerlo rápidamente, hacer preguntas sobre temas específicos de interés y luego pasar a los más importante de la cita: hablar sobre tus síntomas de artritis.

Determina tus preguntas- y trata de encontrar algunas respuestas

Lo más probable es que tengas una lista larga de preguntas, pero es posible que no haya tiempo suficiente para contestarlas todas en esa primera cita. Repasa tu lista y haz algunas investigaciones para ver lo que puedes aprender por tu cuenta. Asegúrate de usar sitios del internet creíbles que ofrezcan hechos basados en la ciencia y respaldados por expertos, como CreakyJoints Español o la CDC en español.

Una vez que hayas reducido tus preguntas, imprime dos copias, una para el médico y otra para ti que incluya espacio para las notas.

Busca Apoyo

Es natural que estés un poco ansioso por una cita médica, por lo que es posible que desees pedirle a un familiar o amigo que te acompañe. No solo pueden proporcionar apoyo emocional, sino que también pueden tomar notas o ser un intérprete de idioma. Asegúrate de que esté claro que, como paciente, tú eres el líder en la conversación, y el papel de esa persona de apoyo se limita a tomar tu mano, dar un empujón si olvidas hacer una pregunta y tomar notas.

Si vas solo, también puedes pedirle permiso al médico para grabar la cita para que puedas escucharla más tarde y asegurarte de que no te perdiste ninguna información importante.

Asegúrate de crear un dialogo 

Crear una buena relación con tu futuro reumatólogo funciona mejor si tratas de ser tan amable y paciente como te gustaría que fuera tu doctor. También ayuda llegar con la iniciativa en tomar decisiones. “Mi trabajo no es dictar lo que se debe hacer, sino guiar el proceso hacia los objetivos comunes de mejorar los síntomas y prevenir el deterioro funcional y la discapacidad”, dice el Dr. Leung. Después de todo, es tu vida y tú decides cómo quieres vivirla.

Tratar tu primera cita con un reumatólogo (o cualquier doctor) como una reunión para la que necesitas prepararte puede ayudarte a aprovechar al máximo la visita. Traer un resumen de tu información médica y de síntomas ayuda a que el tiempo con el reumatólogo sea enfocado y efectivo, así es como puedes sentirte más activo en el proceso de sentirte mejor.